¿Qué es Acumulación en Literatura?; En este artículo hablaremos de una de las figuras retóricas utilizadas tanto en la literatura como en conversaciones cotidianas.

La figura de acumulación es uno de los recursos literarios empleados por muchos autores, desde Shakespeare hasta James Joyce. Veremos varios ejemplos en obras conocidas de estos autores y de otros para entender mejor el concepto de acumulación en la literatura.

Para terminar esta publicación de Estudiar Periodismo Online, explicaremos la función de esta figura literaria.

Acumulación deriva de una palabra latina que significa «amontonar». Es un recurso estilístico que se define como una lista de palabras que encarnan cualidades o significados abstractos o físicos similares, con la intención de destacar las cualidades comunes que tienen las palabras.

La figura de acumulación o atroísmo también es un acto de acumulación de puntos dispersos. Los ejemplos de acumulación se encuentran en piezas literarias y en conversaciones cotidianas.

Enrique V (de William Shakespeare)

Entonces nuestros nombres
familiares en su boca como palabras familiares,
Harry el Rey, Bedford y Exeter,
Warwick y Talbot, Salisbury y Gloucester
Serán recordados en sus copas frescas.

En este fragmento, Shakespeare ha reunido palabras similares para describir al rey Harry. Enrique memoriza el nombre y la nobleza del rey mencionando: «Bedford, Exeter, Warwick, Talbot, Salisbury y Gloucester».

Ulises (de James Joyce)

¿Qué programa de actividades intelectuales era posible simultáneamente? Fotografía instantánea, estudio comparativo de religiones, folclore relativo a diversas prácticas amatorias y supersticiosas, contemplación de constelaciones celestes….

Si buscas ejemplos de acumulación en literatura, James Joyce es el autor que debes consultar, ya que es famoso por utilizar este recurso literario. Aquí, Joyce ha acumulado palabras similares y relacionadas en forma de lista. Se dan opciones entre diferentes carreras intelectuales. Entre ellas, «fotografía instantánea, estudio comparativo de las religiones, prácticas supersticiosas».

Las pequeñas virtudes (de Natalia Ginzburg)

Yo no sé administrar mi tiempo; él sí.
Yo no sé bailar y él sí.
Yo no sé escribir a máquina y él sí.
Yo no sé conducir…

La escritora ha utilizado la negación en las frases dadas. Las cuatro líneas están escritas en forma acumulada, y los puntos dispersos se enumeran juntos, contribuyendo así al vocabulario de los lectores.

Una modesta proposición (de Jonathan Swift)

… sin otro motivo que el bien público de mi país, haciendo progresar nuestro comercio, proveyendo a los niños, aliviando a los pobres y dando algún placer a los ricos…

Este es un muy buen ejemplo de acumulación en el que Swift da sugerencias sobre cómo deshacerse de la pobreza. Ha enumerado varios motivos y formas de resolver los problemas, añadiendo y contribuyendo al significado de las frases.

Cuándo traerá Jesús las chuletas de cerdo (por George Carlin)

Soy un hombre moderno, digital y sin humo;
un hombre del milenio.

Un deconstruccionista diversificado, multicultural y posmoderno;
política, anatómica y ecológicamente incorrecto.

Me han subido y bajado,
me han introducido y externalizado.
Conozco el lado bueno de la reducción,
conozco el lado negativo de la actualización.

Aquí, George Carlin ha utilizado tres categorías de acumulación. En las dos primeras líneas, describe a «un hombre moderno» como «digital y sin humo», y como «un hombre para el milenio». En las dos líneas siguientes, añade: «un diversificado, multicultural… políticamente… incorrecto».

Jueves Santo (de William Blake)

¿Es esto algo sagrado de ver
En una tierra rica y fructífera
Niños reducidos a la miseria,
Alimentados con mano fría y usurera?

¿Es ese grito tembloroso una canción?
¿Puede ser un canto de alegría?
¿Y tantos niños pobres?
Y sus campos son sombríos y desnudos,
y sus caminos están llenos de espinas.

He aquí la acumulación de tres preguntas que inducen una respuesta resentida. Del mismo modo, en la tercera estrofa aparecen tres afirmaciones con un patrón gramatical similar. Estas son: «Y su hijo nunca brilla», «Y sus campos están desiertos y desnudos» y «Y sus caminos están llenos…».

Ulises (de James Joyce)

Frijoles de Rangún, huelgas de tomates, tambores de higos, taladros de suecas, patatas esféricas y cuentas de coles iridiscentes, de York y de Saboya, y bandejas de cebollas, perlas de la tierra, y punnets de setas y flanes…… y colza y rojos verdes amarillos marrones rojizos manzanas maduras grandes amargas y trozos de fresas y tamices de grosellas, pulposas y peluradas, y fresas dignas de príncipes y frambuesas de sus cañas…

Este fragmento es un ejemplo perfecto de acumulación en literatura. Al principio, hay una lista de flores y verduras. Entre ellas se encuentran «judías de Rangún, huelgas de tomates, tambores de higos», y de nuevo una acumulación de diferentes colores, como «rojo verde amarillo rojizo».

La figura retórica de acumulación se utiliza en la literatura, la poesía y todo tipo de escritos retóricos. La función básica es hacer más vivo el lenguaje y contribuir a los significados de las palabras. Además, describe las cualidades de un objeto mediante diferentes explicaciones, si de otro modo quedaría vago o ambiguo.